Aunque tu producto o servicio sigue siendo lo más importante, el precio que le pones va a ser un aspecto determinante para que los clientes lo compren, más allá de los esfuerzos de mercadeo. La idea básica es que el precio permita cubrir los costos y dejar algo de utilidad. Puede que no suene como una actividad muy creativa, pero debería ser tratada al mismo tiempo como un arte y como una ciencia. En este post comparto 9 pasos para calcular precios de productos o servicios.
El precio afecta la forma en que los clientes perciben lo que estás vendiendo. Eso significa que les trasmite las razones sobre cuándo y por qué deberían comprarlo. Si el precio es muy alto podrías perder ventas y si es muy bajo sacrificarías ingresos sin razón y tal vez tu marca se vea perjudicada en el largo plazo. Para calcular precios debes utilizar el ingenio, adaptarte a los cambios y tener apertura a la experimentación.
9 pasos para calcular precios de productos o servicios
A continuación comparto 9 pasos a seguir antes de calcular precios de productos o servicios:
1. Tener claro quién es tu cliente
No pierdas de vista quién es tu cliente objetivo y enfócate especialmente en la experiencia de la gente sobre el problema que estás resolviendo con tu producto. ¿Existen soluciones alternativas que la gente está usando y que podrían ayudarlos a resolver ese problema?
2. Hazte una idea de cuánto están dispuestos a pagar por el producto
Busca tener contacto con tus clientes, para entender mejor el rango de precios en el que te podrías estar moviendo y cómo es que puede afectar tu demanda un cambio en el precio.
3. Revisa qué es lo que está haciendo tu competencia
Compara tu negocio contra otras opciones que se orientan a una base de clientes similar, basado en tu intuición y date una idea de quiénes son los competidores más importantes. Pregúntate qué es lo que haces en forma diferente a ellos y en qué medida eso puede representar un diferencial en la percepción de valor para el cliente.
4. Toma en cuenta tu plan a largo plazo
Responde algunas respuestas estratégicas de largo plazo. Tales como: ¿Esperas que tu producto esté disponible en todos los rincones? O ¿Cómo esperas que se comporte la demanda en los próximos años? ¿Se disparará o se reducirá?
5. Ten claros tus costos
Algo fundamental para calcular precios es tener clara la estructura de lo que cuesta producir tu producto o servicio. En este proceso puede serte útil convocar ayuda externa, pero puedes hacerlo por tu cuenta analizando los costos fijos y variables. Encuentra tu punto de equilibrio y a partir de ahí determina la cantidad de unidades que debes vender de tu producto o servicio para no perder dinero.
6. Utiliza como base tu estrategia de precios
Ya sea que tu estrategia de precios esté basada en valor o en costos, piensa en las subestrategias de precios que podrían aplicarse, tomando en cuenta sus principales aspectos positivos y negativos.
7. Define qué descuentos ofrecerás
Considera tu disposición para reducir tu precio con el fin de vender más. Decide qué tipo de descuentos tendrías la disponibilidad de ofrecer y por cuánto tiempo. Asegúrate que dentro de ese período tu negocio esté obteniendo utilidades.
8. Verifica si no estás infringiendo ninguna norma
Es muy poco probable que infrinjas la ley, pero podrían haber algunas leyes específicas sobre precios para algunos sectores.
9. Revisa tus precios constantemente y de ser necesario actualízalos
Incluso si no hay ninguna razón aparente para hacerlo, es importante hacer periódicamente una revisión detallada de tus precios. La periodicidad dependerá del tipo de negocio y de las circunstancias del mercado, pero podría ser desde cada mes hasta cada 12 meses.
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